Ilusión a raudales en el largo camino hacia Pozas Nuevas. La categoría de la finca lo merece y la compañía, por segunda vez, de mi hijo le pone guinda al pastel de las expectativas.
Sorteo tempranero y nos toca el 6 de Los Llanitos. El camino por el carril de la armada que separa las dos manchas de Pozas Nuevas nos pone los pulsos a mil viendo un par de cientos de reses moverse inquietas al ver la caravana de coches. Mucho ganado sobre la línde que nos hace pensar que el inicio de montería sería frenético.
Màs bonitos los antecesores que el 6. Sin ser un puesto feo, parece de otra finca. Empieza a moverse el campo y se nos meten en el puesto un cordón de venados de poca entidad que se van por donde han llegado a pesar de que el pequeño Fran insiste en tirarlos. Explicarle con seis años el tema de los cupos en el puesto se antoja poco práctico y lo zanjo con un ¨Porque lo digo yo¨.
Un cordón de gamos pequeños corre la banda a los pocos minutos y el del medio que ya dice algo se queda con nosotros en un bonito lance. El único limpio de la jornada junto con un bonito tiro de culo de mi hermano a un muflón que iba pidiendo fuego. Le devolvió la sonrisa tras un fallo justificable al mejor venado que pasó por el puesto a muy larga distancia.
Dos venados más se llevaron más munición de la cuenta para dar con sus huesos en tierra mientras el tiroteo era absolutamente excepcional.
El mismo adjetivo hay que emplear, no hay otro, para describir el tapete de reses que fue llegando hasta que se echó la noche encima: 74 venados, 55 gamos, 77 marranos y 15 muflones. Espectaculares cifras con la calidad que está dando este año pero, con todo, más que aceptable. De hecho había una docena de cabezas importantes que destacaban por encima de un buen número de venados bonitos de montería. Parecido nivel se dió en los gamos mientras que se cobraron tres o cuatro marranos con boca y dos o tres roscas de las que alguna será medalla. Un monterión con todas las letras.
En un coeficiente de reses por puesto tan alto, necesariamente tenía que haber varias posturas con números de Ronaldo o Messi. Para los anales de la finca, el 2 de Valdepuercas que presentó 2 venados, 1 gamo, 1 muflón y...¡11 cochinos! El 3 de la Sortija también se quedó descansando abatiendo 2 venados, 3 gamos, 2 muflones y 3 marranos.
El suceso desagradable de la jornada fue las heridas que le produjo un buen marrano a Rafa Roldán. El excelente perrero hoy de Garnica y que lo fuera de la Rehala San Rafael se vió en un mano a mano con un macho entero del que salió con heridas en la pierna de las que afortunadamente ya se recupera. Desde aquí nuestro reconocimiento y admiración para el en particular y a la gente de las rehalas en general.
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