Iba yo en el coche pensando cómo contárselo a los que no tuviera más remedio. Comer rápido y taparme pronto. El camino desde Los Enebros hasta la casa es largo y da para buscar excusas y atenuantes...la distancia, la falta de apoyos, la estrechez del sitio...En esas estaba cuando mi hijo Fran echó por tierra todas mis cautelas pregonando a todo el quisiera oirlo "!Estos dos paquetes han fallado tres marranos y dos venados. No vuelvo con ellos!"
Y así fue, que los niños y los que se ponen agusto dicen la verdad, que pegamos un petardo importante en ese majestuoso, espectacular y también engañoso 4 de los Enebros. Me consta que otras ilustres escopetas como Rafael Ruda le ha quitado a esa torreta mucha caza en otras ocasiones pero el Sábado no hubo manera. En el pliego de alegaciones anoté, no obstante, la distancia medida que había en la mayoría (no todos) de los tiros que se iba bastante por encima de los 200 metros. En fin, pitos y bronca cosechamos esa mañana con lanzamiento de almohadillas para los toreros que lo único productivo que hicieron fue despachar una bolsa de medio kilo de las exquisitas patatas Perdi recién traídas de las mismísimas faldas del castillo de Aracena. Cosa fina oiga.
El caso es que comenzó demasiado tranquila la mañana por los enebros y las armadas que pegaban al río que tuvieron que esperar a que abrieran los carros de los perros para disfrutar de movimiento de reses. La parte opuesta de la mancha, con más bellota, estuvo tirando prácticamente desde que se empezaron a colocar los puestos.
Ojeo largo y con un tiroteo bastante sostenido y es que en esos barrancos y esos testeros con abundante monte, las reses se "atrancan" de lo lindo y hasta que no se echan encima los perros no corren hacia las escopetas. Hubo puestos que hicieron la carga a última hora y es que había ganado en La Aguja.
El resultado fué de 64 venados, 37 marranos, 11 muflones y 134 ciervas. Poco que destacar en el cervuno pero sí en cuatro cochinos con tratamiento de Usía y especialmente en los muflones ya que fue sorprendentemente buena la media conseguida. Prácticamente todos ellos eran trofeos importantes.
Entre los puestos más afortunados, el 3 del puerto la Aguja que tirò mucho y bien y el que ocupó José María García Rojo que matò un cochinaco que va a dar plata y que empezaba a firmar un fin de semana para el recuerdo. También David Cañete se hizo con un muflòn con aroma a bronce.
Excelente día de caza y el ambiente habitual con el grupo en una jornada de caza que me supo a gloria , a pesar de los fallos,por la compañía de mi hijo y Antonio.
P.D. Tengo curiosidad por saber qué hizo el puesto 4 de Don Felipe. Era uno de mis favoritos. Si alguien conoce el resultado, a comentarios.
P.D. En breve, más imágenes.
1 comentario:
felicidades jose por el guarraco.
D.M
Publicar un comentario