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viernes, 9 de diciembre de 2011

Hotel rural La Caracola, de Andújar.

Una casualidad ha hecho que este puente haya pasado por la Sierra de Andújar. ¡Bendita casualidad! Y las querencias del destino me han puesto en un lugar que desaba conocer desde hace tiempo, El hotel rural La Caracola.
Tanto me ha gustado el alojamiento que no me resisto a recomendároslo, queridos parroquianos.
Se trata de una casa del siglo XIX que perteneció a Jaime de Foxá, perfectamente restaurada en la que hay 8 o 9 habitaciones dobles, varios salones, bodega, comedor, piscina y todo lo necesario para pasar unos días en ese paraiso natural de la Sierra de Andújar.
El hotel "se te mete por la vista" ya desde el magnífico porche. Una construcción sólida y con solera que cuenta con una cuidada decoración que me sorprendió por el contraste con el exterior.
Sin tener ornamentación dedicada a lo cinegético, cualquier aficionado que se aloje en La Caracola va a respirar a montería. No me pregunteis por qué. Quizás el nombre, o su primigenio propietario o tal vez compartir linde con una finca tan montera como El Horcajuelo me ha tenido con la sensación de que en cualquier momento iba a ver una rehala cazando los alrededores del hotel.
Desde luego, unos buenos prismáticos son lo primero que tiene que entrar en la maleta del viajero porque en apenas 5 minutos (de reloj) estarás viendo los venados de Cerrajeros, Los Escoriales, El Gorgojil, Cabeza Parda...ruta obligada, vamos.
El personal del hotel ha estado también a la altura de tan especialísimas instalaciones. Ramón García y su equipo (Inmaculada y Mónica) han cuidado de que no nos faltara un detalle para disfrutar estos dos días. La comida, de corte tradicional, satisfará a cualquiera que tenga el "pico delicado" pues en la cocina, las chicas tienen buena mano y se amoldan a las necesidades del cliente. Para recordar, unos escalopines de gamo más que notables y las referencias de un potaje de garbanzos bacalao y panecillos que , por lo oido, quita el sentío.
Hay menu para los más pequeños y la posibilidad de concertar paseos en coche de caballos, paintball, mountain bike y cualquier cosa que se os ocurra. Ramón es un tío con recursos.
¿Destacar un momento? El jueves de madrugada, con tres "reglamentarios" en el cuerpo, garrota en ristre y bien abrigado, me dí un paseo con luna llena escuchando como se "movía" la sierra que fue una maravilla.
En fin, para pasar un fin de semana, para disfrutar de la berrea, para alojamiento de montería, La Caracola es un sitio de lujo a un precio absolutamente asequible.
Volveré.
Os dejo el contacto: lacaracolacasarural@gmail.com y un teléfono para cualquier consulta 622217921
Y no me voy sin desearle suerte a los afortunados que vayan a Cebrián y a La Loma de la Higuera este fin de semana con Montesa. Podeis mandarme fotos pues se que, especialmente la primera, va a a ser una montería espectacular.

4 comentarios:

Eufemio dijo...

Precioso lugar, gracias por informarnos de esta maravilla, lo tendremos en cuanta para visitarlo. Un abrazo Paco.

Anónimo dijo...

precioso sitio, ¿dónde está concretamente?

Anónimo dijo...

También perteneció a D. Vicente Simó

Anónimo dijo...

Pasamos un fin de semana de mayo en el hotelito, aparte de la maravilla de la casa y el entorno, tubimos la suerte de ver un LINCE mientras dabamos un paseo por la finca. Totalmente recomendable.