Un lance para Aníbal. Juan Antonio Almunia.

Al bueno de Anibal se le sigue recordando a diario en Montesa. Hoy, es Juan antonio Almunia quien le dedica unas letras a su memoria contándonos un curioso lance en La Loma de la Higuera:

"Estamos mi hijo Alejandro y yo de pie mirando al tiradero de frente cuando me hace un gesto con los ojos como que ha escuchado algo atrás. Nos vamos volviendo poco a poco muy despacio y mirándonos la cara ambos pues barruntábamos que había algo detrás de nosotros. Nos vamos los dos encarando el rifle muy despacio y cuando ya tenemos los rifles casi en el hombro vemos que hay una espectacular marrana mirándonos a unos 15 metros o quizás menos. A todo esto los dos muy quietos y poco a poco elevando el rifle para apuntar y volviéndonos para ponernos frente a ella.

 Hace un par de gestos la marrana pero no nos quita ojo y me imagino que estaría diciendo que hago me voy o sigo, encaramos los rifles y yo disparo y el rifle hace "tic".  No quite el seguro. Mi hijo me mira de reojo y yo a él y me hace un gesto con la ceja como diciendo "¿Qué haces?, que te ha oído". Le doy despacio otra vez y se lo quito( a todo esto la marrana muy quieta y seguía mirando con una tensión que se palpaba en el animal, pues ella sabía que éramos sus enemigos, pero quieta, muy quieta, imagino que era su defensa pues diría si me muevo me ven), si se volvía para atrás, la perdíamos al instante pues había un desnivel que la perdíamos de vista, aprieto el gatillo-pum- y le doy en toda la cabeza junto a la oreja y como es lógico la marrana cae fulminante, le digo a mi hijo: "¡ qué tirascazo le he pegado! , ¿ has visto?" Me dice él, "¿Qué dices? El tiro se lo he pegado yo"

 En definitiva que para el colmo solo  oímos un disparo y la marrana solo tiene un agujero en la cabeza, por lo que los dos hemos tenido que adjudicarnos el trofeo, pues no sabemos quién fallo y quien acertó.

Dedicado a nuestro amigo Anibal que era un enamorado de La Loma de la Higuera.