Con el aire de cara...Ramón Díaz.

En Toros y Caza siempre hay cabida para las colaboraciones de parroquianos y amigos. A continuación, los sueños y reflexiones de un amigo y montero de los buenos:

Termina la media veda y empiezan los nervios y los sueños de la nueva temporada. Hay que poner los rifles a tiro, mirar la munición que tenemos y la que tenemos que comprar para ir bien preparados, repasamos mil veces la fechas de nuestros días de caza, hasta recordarlas de memoria, como si de unas oposiciones se trataran.
 Vemos los fines de semana que tenemos libres y  hacemos encaje de bolillos para sacar algo de cash para hacer un último esfuerzo para poder salir otro día mas a la sierra, soñando con ese lance al macareno tantas veces visto con los ojos cerrados y tantas veces imaginado cuando llegamos a esa postura que nos ha tocado en el sorteo.
.Lo primero que hacemos cuando llegamos al puesto y nos encaramos el rifle a esa cara fría, helada por el rocío de la mañana, es imaginarnos como seria ese lance: El marrano va entrar por ahí, yo me encaro el rifle, lo apunto aquí y cuando llegue ahí…¡pum! ...¡en todo el codillo! Ya tengo mi navajero tantas veces soñado y tantas veces visto con los ojos cerrados.
Por esta fechas, ya solo tienes un tema de conversación con los amigos de sierra, "¿Dónde vas este año?" Con esa pregunta empieza una conversación que puede durar horas, siempre escuchando y deseando que la pregunta sea recíproca, como una pelota de tenis que tu compañero te devuelve, ¿y tú?, y ahí empiezas a hablar sintiéndote el centro del mundo en ese momento.
Ya podemos ver con los ojos cerrados, ya tenemos la temporada de nuestra vida aquí.
Suerte a todos y no lo olvidéis….por aquí entrará, aquí lo apunto y…¡pum! Al codillo, ya tengo mi macareno.

Ramón Díaz
Fotografía: Un marrano en Los Alarcones. Julio Mas.
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