Españares. 21 de Noviembre de 2009

El 7 de la Charca fue el puesto que disfrutamos Pepe y yo en Españares. Un punto de mala sombra tenía la postura. A pesar de ello pudimos matar dos venados y vimos un buen puñado de ellos que, bien por ser más pequeños, bien por aparecer algo lejanos o por el viso, decidimos no tirar.

También disfruté de la ayuda de Andrés (guarda de Españares), y el rehalero Miguel López, de Córdoba que junto con su ayudante y, evidentemente, su rehala consiguieron cobrar el segundo venado en un precioso rastreo, que culminó en un espectacular agarre y un complicado remate. Sin su ayuda no habría cobrado ese venado. ¡Y eso a las 3:30 de la tarde! Desde aquí mi gratitud y mi reconocimiento a la gente de la sierra que sabe hacer bien las cosas y que cumple como Dios manda.

Y a gloria me supo además el Viña Pomal reserva del 2003 que llevó mi collera. Un vinito del que me hice amigo en seguida y con el que hicimos pandilla junto a excelente queso semicurado, un lomo bien rico y un jamón "patanegra" de los buenos.

Pero como siempre, lo mejor de lo mejor, vuestra compañía. La de mi familia y mis amigos con los que compartir una montería es algo más que un simple día de caza.

Al cabo de una buena comida de Casa Lucas fueron llegando los casi sesenta venados de muy buena media con unos cuantos realmente buenos y una decena de guarros. En breve, galería de fotos. Un par de ellas.