Había una fiesta en Cardeña y todo estaba preparado. La música, los aperitivos, las cocacolas...Los chicos, a la última y con buen humor. Las chicas, simpáticas y monísimas ellas. ¡Un fiestón vaya! Y, a última hora, deciden los marranos no acudir. Y, ¡claro! una montería a los guarros y que no aparezcan pues es...como un cumpleaños y que no aprezca el que los cumple. Y encima se cuela en el güateque un gachón que no estaba invitado. "Eolo" creo que le llaman. Además se lo tiene muy creido. Un poco endiosado diria yo. Pues se tiró toda la fiesta molestando el muy...
De todos modos, pusimos buena cara al mal tiempo y a la poca consideración de los jetudos ,y la fiesta terminó como todas las fiestas,: tomando "reglamentarios", dando y recibiendo abrazos y conjurándonos para que la próxima temporada llegue en un supiro y sea tan buena como la imaginamos.
Así pues, una decena de marranos, (con un gran macho y otro navajero de tono menor) y un gamo decente fueron los resultados, de la fiesta. Escueto balance compensado, como siempre ocurre en Montesa, por cazar entre familia y amigos.
Se os quiere.
P.D. Un saludo especial para el padre de Paco Millán, el Sr. Francisco que según creo nos lee con frecuencia y se está haciendo poquito a poco con esto de "intelné".
P.D. En uno o dos días, un par de galerías de fotos.
P.D. El marrano grande lo mató Ricardo,...¿quién si no?
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